Como todos sabéis, hay zonas en la piel masculina en las que se acentúan más las diferencias con respecto a la femenina, y es precisamente en la de piel de la barba donde estas se hacen más evidentes, por lo que a grandes rasgos podríamos decir que son principalmente; la densidad de vello, el grosor y la porosidad.
Por un lado la barba del hombre sufre continuamente un proceso de exfoliación constante debido al afeitado diario, cosa que no ocurre en las mujeres.
Por otro lado en la piel del hombre hay una mayor secreción de grasa motivado precisamente por los andrógenos, lo que da lugar a procesos de acné más severos.
Y por último al haber mayor cantidad de colágeno, el espesor de la piel es mayor y por lo tanto el proceso de envejecimiento se inicia más tarde, aproximadamente a partir de los 40.
La barba del hombre empieza a aparecer durante la pubertad y como consecuencia de la diferenciación masculina que producen los andrógenos en el organismo.
Aunque la piel de la barba puede sufrir las mismas enfermedades que en cualquier otra parte, lo hace con unas características especiales precisamente motivadas por el grosor de cada una de las capas que forman la piel.
Dentro de los posibles trastornos o enfermedades de la barba podemos destacar: - Foliculitis y “sicosis” .
- Pseudo-foliculitis.
- Tiña.
- Alopecia areata.
- Otros procesos como acné, herpes, dermatitis seborreica…etc.
De todos estos trastornos hablaremos más detenidamente en sucesivos artículos.